Jesús y el Perdón

Jesús y el Perdón

Jun 29, 2024

Un Devocional con Gloria Serrato


Hola, qué tal! Bendiciones. Mi nombre es Gloria Serrato y hoy quiero contarte una de mis historias favoritas de la Biblia. Esta historia, para mí, fue algo que me llenó de esperanza, paz y tranquilidad, y me hizo sentir amada y perdonada por Dios.




Una Historia de Esperanza

Quiero que me acompañes a leer esta historia en el evangelio de Juan, capítulo 8, versículos 1 al 11:

"Jesús se fue al monte de Los Olivos y, por la mañana, volvió al templo. Todo el pueblo vino a él y, sentado, les enseñaba. Entonces, los escribas y fariseos le trajeron una mujer sorprendida en adulterio y, poniéndola en medio, le dijeron: ‘Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo de adulterio. En la ley nos mandó Moisés apedrear a tales mujeres. Tú, pues, ¿qué dices?’ Más esto decían tentándolo, para tener de qué acusarlo. Pero Jesús, inclinándose hacia el suelo, escribía en la tierra con el dedo. Y como insistieron en preguntarle, se enderezó y les dijo: ‘El que de ustedes esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella.’ E inclinándose de nuevo hacia el suelo, siguió escribiendo en la tierra. Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los postreros. Y quedó solo Jesús y la mujer que estaba en medio. Enderezándose Jesús y no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: ‘Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó?’ Ella dijo: ‘Ninguno, Señor.’ Entonces Jesús le dijo: ‘Ni yo te condeno. Vete y no peques más.’"

Reflexión Personal

Qué sorprendente. A mí me llamó mucho la atención este texto cuando lo escuché por primera vez porque, en algún momento, yo también me hallé en esta situación. No sé con qué te ha catalogado la sociedad. A esta mujer la llamaban de lo peor. En ese tiempo, era muy fuerte que una mujer fuera encontrada en adulterio. Pero yo no sé qué título te ha puesto la sociedad.


La Misericordia de Jesús

Jesús no estaba preocupado por lo que le decían de esta mujer. No se sorprendió cuando le dijeron: ‘Maestro, ella fue encontrada en adulterio’. Probablemente lo sabía porque él todo lo sabe. Sin embargo, él está más preocupado por nuestro futuro que por nuestro pasado. No sé por qué situación la gente te ha catalogado. Quizá la sociedad, quizá tu familia, te han desacreditado.
En algún momento, a mí me llamaron drogadicta, alcohólica, peleonera. Pero yo creo que cuando Jesús se inclinó en el suelo, él estaba escribiendo el comienzo de una nueva historia para esta mujer, y así mismo escribió la mía. También puede hacerlo contigo. Puede escribir una nueva historia desde ceros y decirle a todos aquellos que te acusan que nadie te condena, que ni siquiera él te condena.


Un Nuevo Comienzo

Jesús, siendo Dios, pudiendo condenarnos, nos vino a traer vida eterna, salvación, perdón y libertad. Hoy te invito a que recapacites en esta historia y que entiendas cómo Jesús ha venido a limpiarte, sanarte y quitarte ese título que la sociedad te ha puesto. Hoy quiere decirte: eres amada, perdonada, eres su hija. Jesús te ama, te bendice, te levanta y está dispuesto a escribir una nueva historia.
No sé cómo te han llamado, pero hoy vengo a bendecirte. Vengo a decirte que eres amada, bendita y que Jesús está dispuesto a darlo todo por ti. Él dio su sangre y su vida entera por nosotros. Ese es el mayor precio que pudo pagar por nosotros. Te bendigo en el nombre de Jesús y espero que este mensaje sea de gran bendición para tu vida. Bendiciones.